SODA

La evolución de las metodologías que han permitido diseñar los sistemas actuales, de complejidad creciente, se ha basado en el hecho de abordar el diseño de forma cada vez más abstracta, centrándose en los aspectos funcionales, eliminando al mínimo los detalles relacionados con la implementación, y haciendo uso de herramientas automáticas para resolver las tareas de bajo nivel.

En los últimos años, el conseguir las mayores prestaciones en los sistemas ha planteado arquitecturas de múltiples elementos conectados (on-chip y off-chip) que cooperan en busca de una mayor eficiencia. Este planteamiento, fruto también de las exigencias de las aplicaciones más innovadoras (p.e. inteligencia ambiental), ha añadido al problema de la heterogeneidad (hardware y software) de los componentes de un sistema complejo, el de la heterogeneidad de las comunicaciones, dando lugar al concepto de sistema heterogéneo distribuido en el que los elementos se definen por el servicio que prestan al resto, con independencia de su implementación y su ubicación.

Este proyecto pretende dar respuesta a estos problemas abordando, mediante las abstracciones adecuadas, ambas heterogeneidades en conjunto. La clave de la propuesta se basa en abstraer cualquier recurso del sistema como un objeto distribuido capaz de proporcionar una serie de servicios a través de una infraestructura de comunicaciones estandarizada (middleware). El middleware garantizará el establecimiento de la conexión entre cualquiera de los objetos del sistema, pero además proporcionará servicios tales como la transparencia de localización o la gestión dinámica de objetos, que permitirán la construcción de plataformas flexibles, adaptables en tiempo de ejecución a las necesidades de las aplicaciones.